La bobona de butano se ha empleado como método de calefacción durante muchos años en la mayoría de las casas, aunque poco a poco ha ido desapareciendo hasta convertirse en algo casi anecdótico. No obstante, aún hay muchas casas que conservan este sistema de calefacción, especialmente en zonas rurales o edificios con cierta antigüedad.
Si todavía utilizas butano como sistema de calefacción en tu hogar, seguro que alguna vez te has preguntado cuántas bombonas de butano puedes tener en casa al mismo tiempo y cómo debes hacer el mantenimiento de una bombona.
Hoy en Zoilo Ríos queremos resolver tus dudas respecto a este tema, y además te damos consejos sobre cómo debes guardar una bombona de butano y qué aspectos tienes que tener en cuenta para proceder a un recambio y cómo colocar la bombona de butano.
Lo primero que debes saber es que, efectivamente, hay un límite de bombonas de butano que puedes tener en casa. Solo puedes almacenar dos bombonas de butano a la vez: la que estás usando en ese momento y una de reserva por si acaso se agota el butano antes de lo previsto y de que puedas solicitar una nueva.
En ciertos casos, es posible tener una tercera bombona. Por ejemplo, si se trata de una bombona móvil y esta se sitúa en el interior de una estufa.
Con este límite se pretende poner la seguridad ante todo y evitar que se acumule una gran cantidad de gas butano en casa, además de prevenir posibles accidentes. En caso de que haya algún contratiempo, cuanto menos gas butano haya acumulado, menor será el impacto.
Además de saber que sólo puedes tener dos bombonas en la casa, también es fundamental saber cuál es la manipulación correcta y cómo reciclar las bombonas de butano.
No importa si es la que está en uso o es la bombona de reserva, o si está llena o vacía. La bombona de butano tiene que estar siempre en posición vertical con la válvula hacia arriba, puesto que este gas pesa más que el aire y cambiar la bombona de posición puede provocar que el gas en su interior se mueva, lo cual es peligroso.
La bombona que estás usando no debe estar muy pegada a la bombona de reserva y ambas tienen que permanecer alejadas de fuentes de calor. Esto es así para evitar que pueda tener lugar una explosión y para minimizar la cantidad de gas butano que hay en un mismo lugar.
No conviene que se acumule demasiado gas butano en una misma habitación. Para poder mantener tu salud y prevenir accidentes, en caso de un posible escape de gas, la sala en la que guardes la bombona de butano tiene que tener una buena ventilación para que el gas pueda salir. Además, es recomendable que la ventilación sea mediante rejillas en las zonas inferiores de la habitación ya que, como hemos mencionado antes, el gas butano es más pesado que el aire y tiende a acumularse en la parte inferior de una habitación.
El gas pasa de la bombona de butano a las estufas y cocinas a través de las gomas de alimentación, que deben estar en perfectas condiciones y debes fijarte muy bien en la fecha de caducidad que aparece impresa en las gomas. De lo contrario, puede producirse un escape de gas y no solo estarás desperdiciando tu fuente de calefacción, sino que estarás poniendo en riesgo tu seguridad.
Cada cinco años, debes solicitar que un instalador vaya a tu casa para revisar la instalación de gas. Se encargará del cambio de las gomas o de cualquier otra pieza que no esté en buenas condiciones.
Ahora ya lo sabes todo sobre cuántas bombonas de butano puedes tener en casa y cómo mantenerlas sin problema alguno.